Por qué la creatividad social funciona igual que el marketing tradicional

Hace ya años que existe el marketing digital y ya se han desarrollado todo tipo de estrategias, técnicas básicas y mejores prácticas en torno a estas técnicas ya no tan nuevas.
Cuando la web empezó a ganar presencia como medio de marketing, la industria publicitaria empezó a centrarse en todo lo que tenía de diferente, y había mucho que aprender de ese nuevo medio que estaba naciendo. Muchos anunciantes consideraban que necesitaban explorar el nuevo canal, pero no creían que las agencias fueran capaces de entender y gestionar la web de forma apropiada para ayudarles.
Por ello, desde el principio empezaron a buscarse cargos "digitales" que se encargaran de este nuevo medio, y las agencias digitales empezaron a despegar. Ahora, 12 años después, el marketing digital está entendiendo que, aunque sí es importante entender el medio digital y la forma en que los consumidores lo utilizan, lo fundamental, como siempre, sigue siendo entender al consumidor, explica Mike Parker, copresidente de Tribal DDB en el blog de la compañía.
El marketing digital ya no parece tan diferente. Los anunciantes tienen que seguir entendiendo profundamente a sus consumidores y centrarse en quién está al otro lado de la pantalla, y no sólo en la tecnología que funciona como mediadora. Y es que la gente sigue teniendo las mismas necesidades y deseos que antes, y generar ideas y conexiones con ellos a través de un mensaje poderoso sigue siendo el objetivo para las empresas y los anunciantes. De esta forma, lo tradicional y lo digital está empezando a unirse en muchas formas nuevas e interesantes.
Ahora, estamos inmersos en el boom de los social media y la industria publicitaria vuelve, una vez más, a intentar entender cómo funciona esta nueva tecnología, cómo interactúan los consumidores con ella y si estos nuevos comportamientos y canales son tan diferentes que hará falta crear agencias "sociales" que se encarguen de ellos. ¿No pasó lo mismo hace unos años?
Somos seres sociales, explica Parker y, por tanto, nos encanta hablar unos con otros, conectar unos con otros, aprender unos de otros y estar cerca de las personas y las cosas que nos importan. Evidentemente, los social media representan un reto a la hora de llevar a cabo acciones de marketing y lograr conectar con los consumidores pero, para crear cosas que interesen al público, es esencial entender a las audiencias y qué es lo que les mueve. Una vez más, todo consiste en priorizar las ideas del consumidor y generar ideas creativas que conecten con la gente.
La diferencia de los social media está en que, por fin, se consigue en diálogo bidireccional; la mentalidad de industria colectiva tiene que actualizarse para ser capaz de iniciar una conversación y una interacción justo cuando se lanza algo al mundo, y no al final. El éxito se conseguirá en función de la efectividad con la que se interactúe a los consumidores y de la participación que se lleve a cabo.
Hay que evitar cometer los mismos errores una vez más, y no aislar las acciones y los expertos de social media sólo porque trabajen en un nuevo ámbito. Si se quiere ser efectivo, hay que trabajar sobre aquellos precedentes del pasado que tenían éxito y transformar los puntos de vista en ideas y las ideas en conexiones para crear la creatividad social.